DESCONOCIMIENTO

A veces, es difícil por no decir imposibles escaparse de los sambenitos e ideas preconcebidas que tenemos sobre una persona antes de conocerla e incluso una vez conocida siempre necesitamos darle una segunda oportunidad para que nuestros prejuicios se deshagan o quizás resulten reforzados.

Esto anterior no solo ocurre con las personas, ocurre también con los países, vale que un país se haya hecho un determinado nombre en un área, o una vez destacase en algo para que por siempre jamás su gente o sus paisajes se queden indisolublemente unidos a esa marca. Así tenemos a los chauvinistas de los franceses, a los ingleses tan snob como fríos, o a la cartesiana mente alemana, sin olvidarnos de la verde irlanda, la fría Rusia o la desconocida Mongolia, independientemente de que haya zonas de irlanda que no son verdes, que en Rusia te puedas morir de calor y que hay alemanes que de cuadriculados no tienen nada.

Fijémonos por ejemplo en España, el país del sol y la playa, cosas que efectivamente tenemos, en cantidad y calidad pero que no son nuestras únicas armas para competir en el mercado turístico. La anterior frase deja fuera de foco a la mayor parte del país que no tiene playa y si, sin embargo unos bellísimos paisajes, unos pueblos que no tienen nada que envidiar a los más bellos pueblos italianos o franceses. Una gastronomía a años luz de lo que se sirve en la inmensa mayoría de los chiringuitos playeros, una gente amable y calida deseosa de enseñarte sus tesoros ocultos y con deseos de ser conocidos.

Al igual que a nuestra España, a mi otro país le sucede exactamente lo mismo, quien sabe decirme alguna otra cosa que no sea Lima, el Machu Pichu y Cuzco como lugares de interés Solo ahora empiezan a asomar en los circuitos turísticos la ciudad blanca Arequipa, con sus imponentes volcanes al fondo, el impresionante y salvajemente bello valle del Colca, o el lago mas alto del mundo, el lago Titicaca. Pero al igual que nuestro país, el Perú es mucho mas, es la ciudadela de chan-chan, la mas grande del mundo de arcilla, en Trujillo, son las paradisíacas y desconocidas playas del norte, con Mancora y Zorritos a la cabeza, es el circuito de las ciudades brujas de Lambayeque con Zaña y Ferreñafe como representantes de ese antiguo saber, o los maravillosos bosques tropicales secos, una de las maravillas mas ocultas y desconocidas del Perú. Por no hablar de Chachapoyas y esa construcción que es Kuelap, o de Tarapoto y la laguna azul. Es, la belleza tranquila y sosegada del campo Ayacuchano y su Semana Santa, es la reserva natural del Manu, o el fastuoso río Amazonas. Y al igual que nosotros están dispuestos a enseñárnoslas, a dejarnos con la boca abierta ante los huacos de la luna y el sol en Tucume, a dejarnos extasiados con el mito del Dios Naylamp, o hacer que se nos caiga la baba ante un rico seco de cabrito, un cebiche de conchas negras o un humilde tasajo

P.D. La foto fué tomada por el autor, en el Usno de Wilkaswaman, en Ayacucho