JUSTICIA
No se si conocéis
la historia de los dos ladrones y el caballo ¿Si? ¿No? Bueno ahí va.
Estamos en la Damasco
de las mil mezquitas y los tres mil minaretes, en la época en que el gran visir
Iznogud, quería ser califa en lugar del califa. Una época de paz y tranquilidad,
donde los comerciantes venden productos llegados de todo el orbe, desde
delicadas sedas chinas hasta dulces naranjas de Al-andalus.
Es en ese tiempo
cuando dos ladrones decidieron dar un audaz golpe y, entrar en las caballerizas
del califa y robarle su mejor corcel.
Así que se
escondieron y a la caída de la noche escalaron los altos muros, burlaron la
guardia y llegaron a las caballerizas. Al fin encontraron lo que estaban buscando.
Un precioso alazán negro azabache, de altas y finas patas y estilizado cuerpo y que al correr hacia honor
a su nombre “viento”. Lo sacaron del establo y con sigilo lo fueron llevando
hacia la portezuela por donde deberían sacarlo del palacio. Pero el caballo no
sabemos bien porque en un momento dado pifio, y este ruido hizo que las ocas se
despertasen y graznasen, lo que a su vez
provoco que los perros ladrasen e hizo
que el elefante que el califa utilizaba en las más solemnes ocasiones barruntase.
Todo esto tuvo como fin que la guardia de palacio alertada y despierta fuese a
investigar el origen de tal escándalo. No les fue difícil ni les llevo mucho
tiempo descubrir a nuestros ladrones, que al verse descubiertos y rodeados no opusieron
resistencia ni, intentaron huir. Por oscuros pasillos y pasadizos fueron
conducidos frente al gran visir Iznogud, que quería ser califa en lugar del
califa.
¿Y bien? – Les pregunto
el Gran visir- Decidme, como queréis que os haga pagar vuestra osadía de querer
robar el mas magnifico caballo de nuestro querido Califa, al que Ala guarde
Majestad, Señor,
tened piedad, suplicaron los ladrones, No
es culpa nuestra
Cómo que no fue
vuestra culpa, ¿de quien sino?, ¿del Caballo quizás? Pregunto irónico el Visir Iznogud
que quería ser califa en lugar del califa.
Exacto respondió,
el más alto de los ladrones, fue el
caballo el que nos pidió que le liberásemos
¿Y cuando ocurrió
tal hecho?, volvió a preguntar el visir que empezaba a encontrar divertida la situación.
Fue el pasado
mes, dijo esta vez el mas bajo de los ladrones, cuando nuestro amado Califa, al
que Ala le prodigue todo tipo de bendiciones, salio como hace cada mes a pasear
por la ciudad. Nosotros estábamos entre la multitud que vitoreaba y aplaudía, -
no, no estábamos robando añadió ante la mirada acusadora del visir- y cuando el
califa pasaba frente a nosotros, el caballo se detuvo un instante y nos miro
directamente y mientras lo hacia nos guiño
un ojo y supimos que nos estaba pidiendo que le liberásemos y que le llevásemos
de nuevo a las ardientes arenas del desierto donde se crió.
.Jajaja. rio el
visir No puedo por menos que decir que tenéis arrojo y valor, no solo sois unos
ladrones, sino que también contáis unas historias que podrían rivalizar con las
que cuenta la favorita de nuestro señor, la bella Sherezade.
Solo por eso, voy
a ser magnánimo con vosotros y os voy a
dar a elegir, entre la muerte ahora mismo a manos del verdugo, dijo mientras
señalaba a un gigante eunuco que empezaba a afilar su inmensa espada, os puedo prometer
que no os dolerá, será una muerte instantánea, no sentiréis nada.
¿O? – preguntaron
vacilantes los ladrones que veían una oportunidad de salir con bien de aquello
O.. –prosiguió el
visir, enseñar a hablar en el plazo de un año al caballo, para que nos cuente
su versión. Eso si dijo, prosiguió, si transcurrido el plazo el caballo no dice
una palabra, moriréis de una forma horrible, entre inimaginables torturas y vuestros
gritos de dolor se oirán en todo Damasco y vuestros restos serán esparcidos
para que se los coman los perros
¿Qué elegís? Pregunto
el visir.
Gracias, gracias
excelencia. Gracias por vuestra piedad y clarividencia, gracias por ser tan magnánimo
con estos humildes ladrones, dijo el mas alto de los ladrones, elegimos enseñar
a hablar al caballo.
Así sea. Dijo el
visir mientras se retiraba. Llevadlos a sus celdas.
Pero, pero por
que has dicho eso, dijo el mas bajo de los ladrones, así lo único que hemos
conseguido es tener un año entero de agonía y morir de una forma horrible después.
No desesperes querido
amigo, le respondió el más alto de los ladrones, piensa que en un año, se ha
podido morir el visir, nos hemos podido morir nosotros o podemos haber enseñado
a hablar al caballo.
El próximo 16 de Octubre comienza el
juicio del Prestige y se prevé una duración del mismo de 7 meses . “Solo” han transcurrido 10 años desde que el petrolero se hundió
frente a las costas gallegas, 10 años ya desde que aquellos hilillos de plastelina
cubrieron con un manto negro de varios centímetros de espesor costas y playas provocando
el mayor desastre medioambiental de la historia de España, 10 años ya del grito
de “Nunca mais” y de cientos de voluntarios limpiando aquel desastre. 10 años
ya de la detención del capitán griego del petrolero. ¿Qué ha sido de el? En fin
una eternidad. Y el vicepresidente de gobierno en aquel momento, el de la frase
brillante de los hilillos es hoy nuestro presidente de gobierno. Esta claro que
apuntaba maneras
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