SANTIAGO

Santiago de Compostela en Semana Santa. No hay peregrinos pero si capirotes. No falta la lluvia, predecible e incesante. El rio Xallas. El único rio, o eso dicen, de Europa que desemboca por medio de una cascada en el mar, La vecina Portugal, el mismo idioma solo que algo más cerrado. Y los bichos más feos que he visto jamás, más propios de una película de terror, esa boca llena de dientes, sin ojos y que se cocinan en su propia sangre, que de la mesa de un restaurante. Lampreas un manjar