En estas vacaciones de Semana Santa, para moverme de ciudad en ciudad, de pueblo en pueblo he utilizado únicamente el tren, salvo el avión del primer día. Reconozco que me han sorprendido los ferrocarriles de CP, los “Caminhos de Ferro Portugueses” o comboys como dicen ellos. En lo que es el equivalente a los cercanías españoles los trenes son limpios, modernos, puntuales y con una gran frecuencia de paso. Y enlazan Oporto con las principales ciudades de la zona. Algo mas antiguos se veían, los interregionales como los que unen Oporto con Vigo, automotores diesel de los años 50 aunque eso si totalmente remozados y modernizados en su interior. ¿Las estaciones?, la mayoría de las que visite eran edificios modernos, funcionales, con acceso a Internet producto todo ello de un esfuerzo conjunto entre fondos comunitarios y fondos provenientes del gobierno portugués. ¿La excepción?, la histórica estación de “Sam Bemto” en Oporto, un edificio del siglo XIX en cuyo interior y por medio de u...