PREGUNTA
Lo reconozco, últimamente no hay manera de evitarla. Ya sea
en una reunión social, con amigos, en
familia, en la playa al final siempre surge la pregunta de marras.
La última vez fue en la cena de Nochebuena en casa de mi
cuñado. Estábamos mí cuñado obviamente, mis suegros, yo también os quiero
mucho, unas tías y unas primas de mi mujer, que sin lugar a dudas pueden ser
catalogadas como la versión peruana de la casa de bernarda Alba, mi mujer y
yo. El menú es el típico en el Perú en
estas fechas, un enorme pavo al horno,
un enrollado de cerdo relleno, puré de manzana, ensalada de arroz y una ensalada vegetal, todo ello acompañado de
vino peruano y español. De postre una
riquísima tarta de chocolate que había
hecho una de las tías y algo de turrón que aporte yo.
La conversación transcurría como ocurre en estos casos,
contando las diferencias existentes entre la Nochebuena española y la peruana,
la crisis en España, repaso a la familia con algún cotilleo sobre algún familiar más o menos
cercano, política local, cuando de repente y sin venir mucho a cuento una de
las primas me lanza la pregunta. Mas que pregunta la afirmación
¿Verdad Julio que la comida peruana es la mejor del mundo?
Es entonces cuando tu cerebro empieza a soltar la frase 100
veces dicha con anterioridad ante la misma pregunta.
- Bueno sí, claro, sin lugar a dudas está entre las cinco primeras comidas del mundo…
- No, no -te interrumpe alguien, o todos a la vez- Es la mejor, la primera de todas, por su sazón, por su variedad regional, por la calidad de sus productos, por sus chefs.
- Tu, aunque sabes que tienes la batalla perdida, intentas contra argumentar.
- Realmente, dices, eso pasa con muchas otras cocinas, no solo con la peruana, por ejemplo la cocina china.
- Claro me interrumpen nuevamente, el chifa, pero eso es comida peruana.
- Pero, intentas decir, el chifa es una adaptación de la comida china al gusto peruano realizado por la colonia china que vino en el siglo XIX.
- No hijo, me dice mi suegra. No es así. En España coméis chino verdad.
- Si claro, la digo, tú has estado allí y conoces, además ahí platos muy parecidos, por ejemplo el arroz tres delicias que aquí llamáis arroz chaufa.
- Ves –me interrumpe mi suegra totalmente en serio, habéis adoptado un plato peruano
Ante los argumentos desplegados no puedo decir nada mas, cojo el vaso y dedico un brindis a la comida peruana.
Mientras apuro mi copa y veo a la familia, no puedo dejar de
pensar el cambio que ha dado el tema del orgullo gastronómico en el Perú desde
mis primeros viajes. No es que antes no existiesen el cebiche, el tiradito o el
seco de cabrito, lo que pasa es que no se hacía gala de ello, más bien al
contrario no solo no se presumía de ello, sino que se evitaban. Creo que el
motivo era que estos platos y otros muchos son de origen humilde, popular,
muchos de ellos creados por esclavos en la época colonial, si juntamos su
origen humilde, con no poco del racismo que destilaba y que aún
destila la sociedad peruana, con que la clase adinerada miraba fascinada hacia
los EEUU y USA, y a todo lo anterior le
juntamos el complejo de inferioridad peruano llegamos a la realidad que los
platos que veías en las cartas de los restaurantes, o cuando te invitaban a
comer los amigos en su casa, eran todos ello, platos totalmente disociados de
la realidad del país, tallarines a la boloñesa, filete a la milanesa, osobuco a la miel o
pescado mediterráneo.
Pero, el innegable crecimiento económico, con el aumento no
solo del dinero sino del orgullo patrio, y la aparición de una nueva camada de
chefs, que tras estudiar en el extranjero y volver a casa, no solo tenían la vista puesta en lo que lo que se cocinaba en Francia o España, sino
que buscaron el recetario de sus abuelas, para primero rescatarlo del baúl de
los recuerdos y posteriormente actualizarlo y renovarlo si era el caso, que
se han decidido a preparar y sacar a la luz los platos que comían en sus casas a cuando
eran pequeños, a usar productos de la tierra , a poner en
valor las más de cuatro mil cuatrocientas clases de patatas que hay en el
Perú, ha hecho que ahora sea inevitable
tener que responder a la pregunta ¿Es la
peruana la mejor gastronomía del mundo?
Comentarios